Cotidiano Nº 42

DECLARACIÓN

Nosotras, mujeres de Haití, Barbados, República Dominicana, Granada, Puerto Rico, Martinica, Uruguay, Nicaragua, Canadá y Estados Unidos de América, reunidas del 8 al 10 de diciembre de 2005, en Puerto Príncipe – Haití, en el marco del coloquio Regional sobre la Ciudadanía de las Mujeres, después de haber compartido, reflexionado y debatido sobre las limitaciones del ejercicio de nuestra ciudadanía e identificado ciertas pistas de acción con el fin de garantizar a todas las mujeres y a todos los miembros de nuestras sociedades el gozo del conjunto de los Derechos que garantizan la ciudadanía y la justicia social, reafirmamos en voz alta y fuerte nuestra voluntad de ejercer nuestra ciudadanía sin ninguna limitación.

Nosotras somos ciudadanas de esta región del mundo en donde las estructuras sociales se caracterizan por la negación de derechos,

Donde los pobres, en mayoría mujeres, pagan por la aplicación de las políticas neoliberales dictadas por las grandes instituciones internacionales;
Donde las violencias específicas contra las mujeres ocasionan víctimas cada vez más numerosas;
Donde la inseguridad política y las políticas de terror impuestas por gobiernos, grupos políticos y/o paramilitares forman alianzas con los "cárteles" del comercio ilícito de armas y drogas, amordazan las poblaciones, impiden el ejercicio de la ciudadanía y se atacan cada vez más al cuerpo de las mujeres;
Donde el fundamentalismo religioso forma alianzas con la derecha conservadora para arrebatar a las mujeres los derechos fundamentales en materia de sexualidad y de salud reproductiva;
Donde el racismo y la xenofobia niegan toda posibilidad de coexistencia armoniosa entre los diferentes grupos raciales;
Donde la migración internacional y el desarrollo de las comunidades inmigrantes exigen abrir las fronteras de los derechos más allá de los límites geográficos de los Estados Nación.
La ciudadanía se inscribe en una relación histórica y cultural con la cohesión social – relación esencialmente evolutiva. Si la cohesión social asegura la estabilidad de una comunidad, fija igualmente las desigualdades que prevalecen en ella. La socialización diferenciada según el género asigna a las mujeres un papel de vehículo de valores unidos a la estabilidad en el mantenimiento de la cohesión social en su detrimento, teniendo en cuenta el hecho de que se trata más bien de la perpetuación del orden patriarcal. Sin embargo, gracias a sus exigencias y a su dinamismo, los Movimientos Feministas han sabido articular una acción resuelta social y política que pone en tela de juicio el statu quo. Las demandas de igualdad, de ciudadanía de las mujeres sacuden los fundamentos del orden patriarcal y contribuyen a la construcción de nuevas maneras de convivencia. Sin embargo, existe y sigue existiendo un desafío: romper sistemáticamente esta cohesión social, en una dinámica ciudadana, revolucionaria con el fin de alcanzar valores, ideales, esquemas de equidad y puntos de vista respetuosos del modelo de democracia, de participación y de justicia social.

El cuestionamiento sobre la ciudadanía de las mujeres quiere preservar la especificidad de los Movimientos de Mujeres, queriendo al mismo tiempo llegar a todo el conjunto social. Se trata de crear el lazo necesario y duradero entre cohesión social y participación de las mujeres. Los esfuerzos de las feministas para proponer una redefinición de la noción, en base de su percepción y de sus experiencias, han abierto pistas de explotación. Sobre el plano estrictamente político, más allá de las expresiones individuales, es necesario organizar colectivamente la participación, con el fin de reforzarla y prevenir reflujos posibles. Es necesario también subrayar la importancia de la actividad económica como vector de acceso a la ciudadanía para las mujeres sobre todo en los países en vía de desarrollo donde los recursos son muy limitados y la competición ardua. La problemática de la ciudadanía debe entonces articularse alrededor de temas de equidad y de pobreza y las pistas de promoción de la ciudadanía a través de la participación en el ámbito internacional deberán también analizarse.

Al final de estos tres días de debates, nosotras mujeres de la región del Caribe y de América del Norte y de América Latina, nos comprometemos a:

Estudiar las modalidades para el establecimiento de una red regional con el fin de proseguir la reflexión y coordinar acciones a favor del ejercicio pleno y completo de nuestra ciudadanía;
Proseguir en el ámbito local, regional y nacional la toma de conciencia, la educación - por medio de técnicas informales en las estructuras comunitarias y populares - y la movilización de los diferentes segmentos de las poblaciones por el respeto de la ciudadanía.

Exigimos:

Del Gobierno de la República Dominicana la garantía de los derechos de los ciudadanos/ciudadanas y de inmigrantes de origen haitiano y el respeto de su integridad física;
Del Gobierno haitiano
El establecimiento, en el plazo más corto posible, de medidas que puedan garantizar:
la entrega de las partidas de nacimiento a todos/todas los Haitianos y Haitianas;
la supresión de barreras que limitan a las mujeres en las partidas de nacimiento;
la utilización efectiva de la lengua criolla en la administración pública.
La entrega de un premio de Defensa de las Libertades Ciudadanas a Sonia Pierre por su lucha incesante, poniendo en peligro de su vida, por el respeto de los derechos de suelo de los niños nacidos de padres haitianos en República Dominicana.
Nosotras Mujeres de las Américas, venidas al encuentro de las Mujeres Haitianas en nombre del destino común de los pueblos y en manifestación de nuestra solidaridad hacia ellas, nos declaramos todas Haitianas sin discriminación de género o de raza. Juntas, Mujeres de Haití y Mujeres de las Américas, reafirmamos en este 10 de diciembre, día de la conmemoración de la Declaración de los Derechos de la Persona, que:

¡Los Derechos de la Mujer son Derechos Humanos!
¡No hay Sociedad Democrática sin el Respeto de la Ciudadanía Plena y Completa de las Mujeres!

Puerto Príncipe,
10 de diciembre de 2005